Con el tiempo, sólo recordarás a las chicas que pasaron por tu vida como un torbellino. Las que te despeinaron el alma con el viento de su risa, las que te escribieron su nombre en las pupilas, por las que diste un salto al vacío y te hicieron llorar cuando se fueron. Porque sólo quedan cenizas de aquello que alguna vez ardió. Y esos recuerdos, aunque tú no lo quieras, van a dolerte como duelen las cicatrices: no cuando las tocas, sino cuando detienes la vista sobre ellas.
Yo no seré una de esas chicas memorables. No voy a estrellarme contra tu pecho, ni prenderé fuego a tu nostalgia. No tengo la intención de abrirte más heridas; yo sólo intento llenarte las manos de ese amor que no duele, que no quema, que no deja cicatrices. Aunque no lo consiga, aunque sea imposible.
Como caminan mis dedos por tu espalda, así quiero pasar por tu vida. Como una de esas caricias tan suaves, tan delicadas, que dejan para siempre escalofríos.
Qué divinura!!! me hizo emocionar
ResponderEliminarHola Alicia, que bonito lo que aquí expresas, y así debe ser sin agobiar, que sepa que estas, como esas caricias tan suaves que son las que nunca se olvidan.
ResponderEliminarMe ha encantado:)
Besos.
"Como una de esas caricias tan suaves, tan delicadas, que dejan para siempre escalofríos."
ResponderEliminarme encanto!
los torbellinos suelen dejar secuelas... son las caricias como dulces brisas i los pies sobre la hierba humeda ...lo que cala y acaricia el corazón.
ResponderEliminarEres especial y dudo que a alguien que le puedas dirigir todos esos sentimientos en forma de palabras no haya quedado tocado por un angel como tu
Es una pena que no haya nada nuevo, espero que estés bien.
ResponderEliminarUn abrazo.
HD